En Pakistán, el emprendimiento entre las mujeres está cobrando impulso gracias a iniciativas innovadoras que no solo las empoderan económicamente, sino que también les proporcionan las habilidades, las redes y la confianza necesarias para prosperar en mercados competitivos. Durante el primer trimestre de 2025, varias organizaciones de la sociedad civil (OSC) llevaron a cabo proyectos de gran impacto dirigidos a mujeres de diversas regiones y comunidades, ofreciéndoles oportunidades concretas para el desarrollo de habilidades, la generación de ingresos y el empoderamiento social.
Una de estas iniciativas fue liderada por la Fundación Naqaash en el marco del proyecto Empoderamiento de las mujeres a través de la fabricación de joyas (EWJM). Se impartieron sesiones de capacitación en la Universidad del Sur de Asia (14-15 de mayo de 2025) y en la Universidad de Economía Doméstica (16 y 22 de mayo de 2025), en las que participaron entre 65 y 75 mujeres de entre 20 y 40 años de edad, procedentes de entornos de clase media y media-baja. Las participantes aprendieron el arte de la fabricación de bisutería y accesorios, además de habilidades de mercadotecnia basadas en el marco de las 4 P. Al final de la capacitación, varias mujeres expresaron su interés en crear sus propias empresas de joyería desde casa, lo que demostró resultados tangibles en términos de generación de ingresos e iniciativa empresarial. Lo que hace que esta iniciativa sea especialmente innovadora es que se centra en las mujeres que a menudo se enfrentan a restricciones culturales y de movilidad, permitiéndoles trabajar desde casa mientras crean negocios sostenibles.
Otra iniciativa pionera fue emprendida por SRD a través de su proyecto «Empoderamiento de las mujeres mediante la mejora de sus habilidades». Entre marzo y junio de 2025 se celebraron dos grandes seminarios de sensibilización en Rawalpindi e Islamabad, en los que participaron 235 mujeres. En estas sesiones se presentó a las mujeres herramientas digitales, plataformas de comercio electrónico y oportunidades de ingresos en línea, lo que les permitió iniciar actividades empresariales en el mercado en línea. Además, SRD participó en una cumbre de tecnología y emprendimiento de dos días de duración, lo que amplió aún más las redes de las participantes y su acceso a posibles colaboraciones empresariales. El aspecto innovador de la iniciativa de SRD radica en dotar a las mujeres de habilidades digitales en un país en el que el acceso a la tecnología y a las plataformas en línea suele ser limitado para las mujeres, especialmente para las que pertenecen a comunidades marginadas.
La Facilitation Alliance (FA) puso en marcha el proyecto Kissan Ki Beti, centrado en las mujeres rurales y los pequeños agricultores. Durante el primer trimestre, la FA llevó a cabo dos importantes sesiones de movilización, una con representantes de la sociedad civil y otra con mujeres beneficiarias de las zonas rurales, para presentar los conceptos de valor añadido en la agricultura y reducir las pérdidas poscosecha. Estas sesiones se celebraron en la Universidad de Layyah y en el Instituto de Ciencia y Tecnología Muhammad Ali, y en ellas participaron más de 50 mujeres y partes interesadas. Las sesiones también incluyeron un programa de formación de formadores (ToT) para el manejo de maquinaria, con el fin de preparar a las mujeres para gestionar de forma independiente las actividades de valor añadido. Lo que hace que esta iniciativa sea innovadora es que llega a las mujeres de las zonas rurales, que rara vez reciben apoyo con programas de desarrollo de habilidades, combinando las habilidades técnicas con oportunidades de emprendimiento en la agricultura.
Por último, GIA puso en marcha el proyecto Eco Dignity, dirigido a los miembros de la comunidad Khawaja Sira y otros grupos marginados de las zonas urbanas. Durante el primer trimestre, la organización llevó a cabo dos sesiones de sensibilización comunitaria con más de 75 participantes, además de adquirir e instalar equipos de producción respetuosos con el medio ambiente. Se preseleccionó a veinte participantes para el primer grupo de capacitación, que comenzará a mediados de julio de 2025 y les proporcionará las habilidades necesarias para producir y vender productos sostenibles. Esta iniciativa es innovadora porque se dirige a personas e s que a menudo quedan excluidas de las oportunidades económicas convencionales, proporcionándoles no solo habilidades para ganarse la vida, sino también técnicas de producción sostenibles desde el punto de vista medioambiental.
Estas iniciativas demuestran colectivamente un enfoque transformador del emprendimiento femenino en Pakistán. A lo largo del primer trimestre, se llegó directamente a más de 400 mujeres y miembros de comunidades marginadas a través de programas de capacitación, sesiones de sensibilización y desarrollo de habilidades. Los resultados concretos incluyen la creación de pequeñas empresas, el desarrollo de habilidades digitales y de mercadotecnia, y una mayor independencia económica para los participantes.
Lo que distingue a estas iniciativas es su enfoque en la inclusión, la sostenibilidad y la innovación. Se dirigen a mujeres y grupos marginados que tradicionalmente están infrarrepresentados en los programas empresariales, proporcionan habilidades prácticas que pueden generar ingresos inmediatos y, en algunos casos, como el proyecto Eco Dignity de GIA, integran la sostenibilidad medioambiental en el modelo económico. Más allá de la generación de ingresos, estos programas ayudan a las participantes a ganar confianza, ampliar sus redes y relacionarse con instituciones y mercados que antes les eran inaccesibles.
Mientras Pakistán celebra el Día Internacional del Emprendimiento Femenino, estos proyectos ejemplifican cómo el desarrollo estratégico de habilidades, el apoyo específico y los enfoques innovadores pueden transformar la participación económica de las mujeres. A través de la colaboración continua con FAME y otros socios, estas OSC están allanando el camino para un futuro en el que más mujeres puedan liderar negocios sostenibles, inspirar a sus comunidades y contribuir de manera significativa a la economía.
